También citada como Luparia, Luporia y reina Lupa. Poderosa dama pagana, señora de las tierras donde se encuentra la actual ciudad de Compostela y de sus contornos y a quien los discípulos de Santiago solicitan permiso y ayuda para enterrar el cuerpo de su maestro, tras llegar a Galicia. Ciertas leyendas locales si-túan su residencia en el castro Lupario, cuyas ruinas se conservan en las inmediaciones del Camino Portugués, cerca de Santiago, aunque los relatos más conocidos y difundidos no le otorgan un lugar concreto de residencia. Se limitan a hablar de su palacio, sin más precisiones. Es uno de los personajes más populares y enigmáticos de la tradición jacobea.
Lupa, que al principio intenta engañar a los discípulos del Apóstol con varias estratagemas -los envía a Fisterra a entrevistarse con un poderoso personaje que los encarcela, los manda al Pico Sacro a por unos bueyes, pero acaban teniendo que enfrentarse a un dragón-, termina convertida al cristianismo. Lo hace después de observar que los discípulos superan de forma sorprendente todas las adversidades que padecen por su culpa.
Nacida de las leyendas de la traslación del cuerpo de Santiago a Galicia, en más de una ocasión se ha pretendido buscarle connotaciones con personajes reales. Se ha llegado a citar que la dama cuyo nombre aparece en una lauda reutilizada en el primer altar de Santiago (s. IX) [Atia Moeta] podría haber sido la misma Lupa. En este sentido, una placa al principio de la galería derecha de la cripta de la catedral compostelana, casi imposible de ver por el público, recuerda, desde las excavaciones de 1879, que bajo sendas losetas de esa parte y de la izquierda reposan unos restos que la tradición considera los de la reina Lupa y dos de sus familiares.
Alguna leyenda de la Costa da Morte (Galicia) señala que está enterrada allí, en las inmediaciones del mítico monte Pindo.
Las referencias directas a Lupa aparecen en el Codex Calixtintus (s. XII), cuyo libro III aparece la traslación apostólica en la versión más detallada hasta ese momento. En este texto se le cita en latín como Luparia. En los relatos más antiguos de la Epístola del papa León (s. IX) no se da su nombre, pero sí aparece en las más significativas versiones posteriores. Es el caso de las ofrecidas por los manuscritos franceses de Fleury-sur-Loire (Francia) y Saint-Pierre-de-Gembloux (Bélgica) y la versión del francés Jean Béleth (ss. XI-XII). El conjunto de estos relatos ofrece una visión de Lupa coincidente en lo esencial: una poderosa dama o reina pagana de la zona que intenta engañar y destruir a los discípulos de Santiago por todos los medios, pero que al final acaba cediéndoles un terreno para enterrarlo y convirtiéndose al cristianismo.
El mito de la reina Lupa también aparece en los relatos de los llamados siete varones apostólicos, que habrían sido, para algunos, los auténticos evangelizadores de Hispania, y no el apóstol Santiago, como defiende la tradición compostelana. Estos varones, enviados por San Pedro y San Pablo a la península, se encuentran en el sudeste español con una dama con este nombre a la que convierten al cristianismo. No tiene esta Lupa la riqueza de matices de la Lupa de la translatio. En todo caso, algunos reconocidos estudiosos, como Díaz y Díaz y M. Llinares señalan que el relato original se trasladó a Galicia en el momento del descubrimiento del sepulcro de Santiago, hacia los años 820-830. Otros autores sostienen un origen galaico.
El nombre de Lupa parece derivar del latín lupus [lobo; prostituta]. En relación con el segundo significado, en gallego se conserva el vocablo lurpia para referirse a una mujer perversa. Antonio Balboa, estudioso del personaje, señala que en la Edad Antigua resultaba habitual encontrar nombres que comenzaban por Lup- o Lub-. Este mismo autor también vincula el nombre con Irlanda, donde una de las hermanas de San Patricio, evangelizador de la isla, se llamaba Lupait o Lupit. Las teorías iniciáticas han vinculado a Lupa con Lug, antigua divinidad solar, cuyo culto se habría extendido por gran parte de Europa, incluida Galicia, y habría logrado pervivir hasta tarde en el Camino de Santiago. [MR]
V. Lug / Lupario, castro / Pico Sacro / translatio