Población de 184 habitantes (804 m) en el Camino Francés a su paso por la provincia de León, Castilla y León. A 321 km de Santiago. Se caracteriza dentro del orbe jacobeo porque es uno de los puentes que ya en el año 1139 sorprenden al escritor del Codex Calixtinus. Aymeric Picaud hablaba de la grandes magnitudes de este viaducto que cruza el río Porma: “El Porma, que pasa por un gran puente que hay entre Mansilla y León.” Aunque en la actualidad no ha perdido su aspecto medieval, la construcción sufrió numerosas restauraciones debido, en gran parte, a la destrucción provocada por las crecidas del río, responsables, probablemente, de la gran desigualdad de sus 18 ojos, muy diferentes entre sí.
Justo al lado del viaducto, se halla una gran casa del siglo XVI, fundada por un canónigo del Cabildo de León, que funcionó como hospital y albergue para peregrinos, aunque se cree que pudo haber uno anterior en la zona. Aquí encontramos también lo que bien pudiera considerarse como la primera “ambulancia” de la Ruta, pues el fundador de este dispensario usaba un burro para transportar a los peregrinos enfermos hasta la ciudad de León. En la actualidad no quedan vestigios ni referencias escritas de este lugar como localidad, por lo que parece que sólo desempeñaba la función de área de servicios para los caminantes. [TRI]