Neda
Municipio de la provincia de A Coruña, Galicia, que cuenta con 5.700 habitantes. Está situado en el Camino Inglés, en la vía que parte desde Ferrol, a 98 kilómetros de distancia de la meta jacobea.
El Camino entra en Neda a través del puente que salva el río Xubia, a la altura en la que vierte sus aguas a la ría de Ferrol. El puente gótico de tres arcos que Fernán Pérez de Andrade decidió levantar en la desembocadura del río fue sustituido más tarde por uno de madera, hasta que se hizo el de cantería en 1831, según anuncia la inscripción de uno de sus pretiles. Couceiro Freijomil afirma que “es de sillería y de dos arcos, reforzados por sólidos rompeolas, y fija el término de la ría de El Ferrol, al lado de un muellecito habilitado para una moderna fábrica de tejidos”. A la altura de este puente, llamado también de los Andrade, se encontraban una fábrica de tejidos y el hermoso molino de marea de As Aceas, que aprovechaban la energía producida por el agua del río para sus actividades industriales.
Una leyenda habla de un túnel bajo el agua situado en las inmediaciones de la desembocadura del río, que hacía de pasadizo secreto entre las poblaciones de Xubia y Narón. Era como un laberinto de oscuras galerías en el que habitaban seres encantados. Cuentan que en la Edad Media fue utilizado por los frailes del monasterio de San Martiño de Xubia cuando querían ir a Neda sin ser vistos. También se dice que fue empleado como refugio o como pasadizo secreto por los escapados durante la Guerra Civil.
Una vez cruzado el río, la ruta continúa por el muelle, el camino de O Empedrón y llega hasta el albergue de peregrinos. En la actualidad, Neda acoge el primer albergue público del Camino Inglés, a 12 km de Ferrol, desde donde los peregrinos llegados por mar a este puerto se dirigían a Compostela. La parada, a pesar de la poca distancia recorrida, es recomendable, por la belleza del entorno del río Xubia y porque no hay otro albergue público hasta Miño, a 35 km de Ferrol.
La vinculación de Neda con el Camino de peregrinación viene marcada por el antiguo hospital de peregrinos, que acogía tanto a los que iban a visitar en Compostela la tumba apostólica como a los que se dirigían a pie a Santo André de Teixido, el otro gran santuario gallego. Hoy se conservan, junto a la casa consistorial y la torre del Reloj, de finales del XVIII, una cruz y la inscripción fundacional como únicos restos de este antiguo hospital.
En la inscripción se afirma que el hospital fue levantado por Pedro García y Margarita Fernández en el año 1500: “Este espytal de Sante Espiritus fezo Pero Garcia e Margarida Fernandez Ano MD”. Estos dos benefactores fundaron también en Neda las capillas del Espíritu Santo y de San Roque, advocaciones vinculadas al Camino de Santiago. El Espíritu Santo dio nombre a muchos hospitales para peregrinos, como el cercano de Pontedeume, mandado construir sobre el puente por Fernán Pérez de Andrade, y San Roque, conocido por su atención a los leprosos hasta el punto de que llegó a contagiarse la enfermedad, es representado siempre con atuendo de peregrino y adornado por las conchas de vieira. Muchos hospitales e iglesias del Camino tienen también a San Roque como patrón.
En su testamento, Pedro García y Margarita Fernández mandaron que las rentas del hospital fueran administradas por un mayordomo de su familia y que el centro prestase acogida y proporcionase mantenimiento y sustento a pobres y peregrinos, que en muchos casos eran una misma cosa.
También en un testamento dictado en 1529, Pedro de Sillobre manda que se digan en la capilla del hospital dos misas y que “lo sobrante se meta en obras pías en dicho Hospital”, y que “si se hiciere algún cáliz de plata para el mismo Hospital y capilla den sus herederos un ducado para ayuda de tal cáliz”; por último, dice también “que a la muerte de su mujer se den al Hospital una cama de ropa”.
El hospital aparece citado asimismo en el Catastro del Marqués de la Ensenada, realizado en 1752, donde se constata que en Neda “en el termino de esta Villa y Calle prinzipal de ella, Hay un Hospital Con la adbocación de Spiritu Santo, fundado por Margarita Fernandez, en el que se reciven enfermos y Peregrinos, y el producto de sus rentas axziende a mil Cinquenta y nueve rr[eale]s y medio vellon, de cuia cantidad percive Juan Orozco, vecino de la feligresia rreferida de Santa Maria de Neda, Ciento y diez rr[eale]s v[ell]on, y la restante se divierte en las precisas Redificaziones y manutenzion del d[ich]o Hospital, camas para los enfermos, alimento, y medicamento para su Curazion”.
En el Archivo Diocesano del Obispado de Mondoñedo está documentado el paso de peregrinos por este hospital y en la Biblioteca Municipal de Ferrol puede consultarse su libro de cuentas.
Sin embargo, antes de llegar a la torre del Reloj, donde se hallaba el viejo hospital, hay que pasar por la iglesia de Santa María, donde se conserva la imagen del Cristo de la Cadena, que dicen que llegó -en una leyenda repetida en otros lugares- siguiendo la ruta marítima de peregrinación desde Inglaterra, después de la excomunión del rey Enrique VIII (1509-1547) y la separación de este país de la Iglesia de Roma. Como consecuencia de estas desavenencias muchos devotos y algunos comerciantes trajeron a Galicia imágenes, relieves sueltos y relicarios muy notables en alabastro y madera. Docenas de barcos ingleses arribaban anualmente a los puertos de A Coruña y Ferrol con estas obras de arte que se podían transportar fácilmente, dadas sus reducidas dimensiones.
Entre estas imágenes podemos citar las tallas en madera de Nuestra Señora la Inglesa y de Santa Ana enseñando a leer a la Virgen, que fueron vendidas en el puerto de Ferrol, más tarde llevadas al monasterio de San Martiño de Xubia y luego donadas a la catedral de Mondoñedo, donde hoy se veneran; también vino con ellas la citada imagen del Crucificado que actualmente se aloja en la iglesia de Santa María de Neda. Asimismo, se conservan una Virgen inglesa en madera y un relieve de alabastro en el que se representa la escena de la Natividad y la Epifanía, en el monasterio de San Martiño Pinario, en Santiago; una estatua en alabastro de Santa Catalina, en el Museo Provincial de Lugo, y un relieve en alabastro de la Trinidad, en el Museo Provincial de Pontevedra, entre otras muchas.
Desde la calle Real de Neda, con sus casas blasonadas y sus soportales, que sirven para refugiarse de la lluvia o del sol, según la época del año en la que se realice la peregrinación, se pasa muy cerca de la iglesia de San Nicolás, del siglo XIV, aunque sólo conserva de esta época la capilla Mayor y el ábside. En su atrio se aloja un cruceiro gótico que tiene en el anverso y en el reverso dos representaciones del Crucificado, como el famoso cruceiro de Melide, en el primer municipio por el que atraviesa el Camino Francés a su paso por la provincia de A Coruña. Hasta el año 1975, el cruceiro de San Nicolás estuvo en el Camino del Paraíso, situado en la Ruta Jacobea y cuyo nombre hace alusión a la puerta de entrada a la catedral que utilizan los peregrinos al llegar a Santiago por el Camino Inglés, en la fachada de A Acibechería, justo enfrente del monasterio de San Martiño Pinario. En 1975 este histórico cruceiro fue colocado en su emplazamiento actual.
El Camino Inglés abandona el municipio por la parroquia de Santa María de Neda, por los lugares de O Regueiro, O Puntal de Arriba y Conces. [JS]